El sector bancario es una máquina de propaganda bien engrasada tratando de convencer a todos de que la economía seguirá funcionando.

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Ganó Wall Street.

Estados Unidos no ha reformado culpablemente el sector financiero 5 años después de la caída.

Haciéndose eco del reciente artículo “Cómo Wall Street ganó” en el que Foroohar Rana en tiempo escribe sobre cómo los Estados Unidos no han de reformar el sector financiero cinco años después de la quiebra de Lehman, interviene el premio Nobel de economía Joseph Stiglitz en el debate sobre la revista estadounidense para empeorar las cosas por las opiniones expresadas por Foroohar. En relación con el escándalo Libor, Stiglitz señala que nada se ha hecho para reemplazar la manipulación en manos de los bancos, una figura ficticia, que sigue siendo la base de más de 300 billones de dólares en el mercado de valores. Y todos los días por qué Estados Unidos sigue siendo el riesgo de explosión de las burbujas especulativas de la conducta irresponsable de los bancos.

Si bien se reconoce que el origen de la crisis es detectable en las hipotecas subprime, dice Stiglitz en su análisis, las autoridades siguen permitiendo la concesión de préstamos sin garantía todos los días. La única acción legal exitosa contra la crisis fueron las empresas privadas de América y Australia. La causa de esta negligencia es evidente y rastreable en el vestíbulo del Congreso ligado con la administración en un círculo financiero que le permite ir más allá de los errores del pasado.

La respuesta de la Tesorería del artículo TIME, argumenta el Premio Nobel de Economía, es un testimonio de la bondad de la relación Foroohar: Este artículo dice así sólo el 40% de las normas exigidas por la Comisión Dodd-Frank se llevaron a: el Tesoro parece orgulloso de tres años de distancia. Y además de la demora inaceptable de la investigación de la ejecutiva, la administración no ha hecho lo suficiente en la transparencia de los mercados de derivados y en contra de las prácticas monopólicas de la industria de tarjetas de crédito.

El Tesoro ha argumentado que Estados Unidos tiene un sector bancario que es más sano, más fuerte y más consciente de hace cinco años. Se trata de un resultado cierto, pero no es muy satisfactoria si tenemos en cuenta el nivel de partida. La cuestión central es que la crisis ha creado una gran oportunidad para el cambio que fue totalmente no: dejando a un lado los problemas demasiado grande para quebrar – los mega-bancos también son demasiado grandes para ser manejados y ser acusados ​​de sus responsabilidades, bancos estadounidenses son culpables de una serie de violaciónes graves – los abusos de poder, la manipulación Libor, el lavado de dinero – se mantuvo casi en total impunidad.
El Tesoro ha incluido acertadamente algunas mejoras: más controles sobre los movimientos de capital y la reducción del apalancamiento TTRA todos. Pero, ¿es suficiente? Los principales economistas que han estudiado el asunto uno es de los empleados del sector confirman que no, si se considera que ni siquiera son capaces de asegurar que los bancos volverían a la empresa para asegurar la prestación de su servicio primordial y primario: el flujo de préstamos a pequeñas y medianas empresas.

El sector bancario es una máquina de propaganda bien engrasada tratando de convencer a todos de que la economía seguirá funcionando si usted escucha a sus directivas. Incluso la administración es una máquina de propaganda bien engrasada tratando de convencer a todos de que, con la economía de los riesgos del abismo, está tratando de reformar el sector financiero. Pero los estadounidenses saben que la realidad es otra.

Tomado de: http://www.lantidiplomatico.it/dettnews.php?idx=83&pg=5481

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